Este pequeño y simpático oso no ha comido desde el viernes pasado, y todos entendemos que tiene mucha hambre.
Pero, ¿quién de nosotros va a ser capaz de ayudarlo a comer hasta la saciedad?
Estas frutas jugosas atraen sus ojos y le hacen aún más hambriento.
¡Ah, si tan sólo él pudiera probarlos!